¨Te digo lo que pienso¨

Todos nos hemos cruzado alguna vez con personas que se jactan de ser ¨frontales¨, que ¨dicen lo que piensan¨. Es ineludible darse cuenta de que esta gente cataloga dicho rasgo de caracter como un don, algo de lo que están sumamente orgullosos.
Esto me resulta dificil de comprender. Porque no me los encuentro diciéndole a un representante de la ley ¨Estoy convencido de que usted es un botonazo, y que le resulta simpático el soborno asi como tampoco me caben dudas de que ud. a participado de algún secuestro¨. Esto nunca sucede, por supuesto. Ahora bien, no veo que se presenten dificultades a la hora de comunicar los mas bestiales pensamientos cuando el receptor del mensaje no puede ejercer la violencia armada como respuesta (dicho en criollo, bajarlos de un cuetazo). Son mas que comunes sinceridades del orden de ¨cómo no te van a decir eso si calzas semejante cara de nabo¨, o ¨¿a ver cuando hacés pública tu homosexualidad?¨. Pero hay veces que este arranque de sinceridad resulta totalmente gratuito así también como ofensivo, sin realmente tener relación una cosa con otra, resultan asi frases como la siguiente ¨como pretende usted ser arquitecto si su señora usa unas minifaldas que para qué le voy a contar...¨ esto, es decir REALMENTE lo que se piensa....si se es un P3*0+ud#.
Cuando uno manifiesta que le agrada cuando le gente dice lo que piensa, no significa que se tome literalmente. Hay que matizar de alguna manera nuestros pensamientos en bruto y transformarlos en opiniones. Lo mismo sucede con nuestros actos. De llevar mas allá la ¨frontalidad¨ y vivir bajo el orgullo de la premisa ¨yo hago lo que pienso¨ creo que en mi caso ya estaría preso y con un par de homicidios en mi haber, y Luciana Salazar habría sido violada una docena de veces incluso por los mas notables miembros de nuestra sociedad. Esto resulta tan pretencioso como pensar que uno le esta haciendo un bien al otro por decirle crudamente sus pensamientos. Si es tan apreciable decirlo, tanto mas sería hacerlo (espero no estar haciendo apología y que se declare el día de ¨hago lo que se me antoja¨).
Para los que no compartan mi opinión, les ruego que no se escandalizen cuando, en el futuro, le pregunten por sus intenciones al novio de su hija, y este conteste: ¨mayormente....que me entregue la baticueva*¨
*Perdón por el leguaje chabacano.