¨Hay tres o cuatro modelos de cara y no estamos al tanto!¨

En algunas ocasiones me he enfrentado con caras que me impulsaban a asociarlas a imágenes que alojaba en mi mente. Estas imágenes por lo general son de otras personas, encontrando en el rostro visualizado en el momento, algún parecido ya sea en un rasgo o en carácter general con otro sujeto.
Es frecuente ver en tal o cual persona un parecido a alguien de la farándula. Esto es uno de los divertimentos que se pueden encontrar en las fiestas multitudinarias, en las que mayormente se buscan parecidos en los mozos con estrellas de fama ecuménica, o local.
Comunicarle a una persona su parecido con alguien conocido puede ser considerado un arma de doble filo. He escuchado gente que le han encontrado un parecido con ¨Pampita¨ y siendo infinitamente feliz, aún siendo ostensible la generosidad que ha tenido el que le ha comunicado tan distante similitud (sin dejar de lado la clara intención de levante). Aunque también hay un lado hiriente, cuando a uno lo comparan con personajes desdeñables, que son muchos. Sin ir más lejos en algún momento de mi vida me han denunciado un gran parecido a un duende?verde (sí, luego de poner cara de análisis, esta persona agregó el matiz del color verde para cerrar la idea).
Al parecer, sucede también que la gente halla en muchos semblantes la condición de ser genéricos, es decir de poder parecerse a cantidad de personas diferentes (obviamente sin mutar la estructura facial, claro está). Es mas, en mi caso se han encontrado personas con mi aspecto tanto en la misma facultad a la que asisto, como andando por la calle lo mas campantes haciendo uso de mi imagen, y provocando el equívoco y la perplejidad de mis conocidos. Hasta yo mismo me he cruzado con gente parecida a mí, y no, no he muerto, como señala el mito urbano.
Presento aquí la lista de personas con las que me han encontrado parecidos, de los cuales comparto muy pocos.

David Trezeguet-Fobalier (futbolista): parecido 40 %
Will Smith-¿Actor?: parecido 1%, solo en lo negro (una pena).
Paolo-¿cantante?: parecido 20%, al parecer me parezco desde el tabique de la nariz, hacia abajo. Realmente, no comparto.
Samuel Jackson-Actor: parecido 50%, cuando estaba rapado era bastante similar, por desgracia?
Denzel Washington-Actor: parecido 1%, una generosidad sin precedentes de mi hermana cuando me vio por primera vez con traje.
Doug Narinas-Dibujo animado: parecido 30%, no sé?está bien que sea azul y sea un dibujo, pero yo tambien veo algo ahí?
Duende Verde-Ser imaginario: parecido 50%, me han notado el parecido a un duende en otras ocasiones, y con la seguridad que me lo dijeron tiene que valer algo?

En la mayoría de los casos el parecido se remite a solo una característica personal, en mi caso, el ser morocho. Es por eso que no será difícil que se hayan cruzado con gente que distribuya similitudes a troche y moche, basándose en rasgos sumamente generales, como por ejemplo, ser canoso, a lo que se le atribuirá un inmediato parecido a quien también lo sea (vg. Juan Di Natale, o el ya finado Castelo).

¨Morir con elegancia¨

Tratar un tema tan crudo como la muerte puede ser de una dificultad muy grande y poner en jaque la credibilidad de las teorías postuladas, más que nada por la falta de testimonios que puedan servir para esclarecer tan dificil tarea.
Algunos pensarán en el señor Sueiro como una buena opción para nutrir este espacio de debate, pero, como he explicado en otra ocasión, el tema del túnel y la luz blanca no me parecen para nada convincente, por este hecho desconfío de este hombre y lo denuncio como un embustero que cree en un paraíso hollywoodense, y lo que es peor, quiere convencernos de que él se ha ganado el cielo, con todos los requisitos que hay que cumplir para dicho beneficio.
Mas allá de todo esto, el tema de la muerte es muy polar (NO, no me refiero a los osos, y NO, no me enternecen). O se está muerto, o no se lo está. No se admiten gradaciones o variantes intermedias. Se puede estar cercano a pasar a mejor vida, pero, mas allá de las frases vulgares, no hay manera de estar ¨un poco muerto¨. Claro que descartamos también, en este punto a la gente que parece muertos en vida, como ser el caso de importantes personalidades que no nombraremos en este espacio, quizá por decoro o por respeto.
Tras años de estudio y de investigaciones, la redacción de Esto no me gusta nada!!! ha llegado a la siguiente conclusión: ¨a nadie le cae simpático morirse¨. A pesar de esta máxima con la que hemos dado, hay gente que aún intenta morir con elegancia. Es decir, se empeña en cerrar su ciclo vital muriendo en pose triunfal (quizá erótica, depende de los ideales del finado), incluso llegan a dar discursos filosóficos o metafísicos. Esta parafernalia de Show pre-defunción, tiene por fín inmortalizarse dejando cierta imagen para el recuerdo, mas allá que en un futuro muy cercano se pasará a tener una existencia mucho menos productiva y elocuente.
Por mi parte, yo soy más partidario de la corriente pragmática simplista del morir. El día que vea que me está por pasar a buscar el ñato (a saber, Dios), enunciaré a la gente reunida como espectadores de tal evento, la frase ¨ha sido un gusto, si me disculpan, procedo a morirme¨.